Ahora que dejo el Fatás

Ahora que acabo sexto de primaria y me cambio de colegio, me doy cuenta de que me voy haciendo mayor y que va a empezar otra etapa de mi vida, espero que mejor.

En estos cuatro años en el colegio, me he tenido que adaptar a una nueva vida y a unas nuevas costumbres, que no eran siempre las que yo quería o conocía. Por eso ha habido momentos muy difíciles para mí porque no entendía lo que ocurría y no daba importancia a lo que otros la daban.

He tenido que alcanzar a mis compañeros de clase en los estudios; lo que ellos habían hecho en nueve años, yo lo he tenido que hacer en cuatro años y medio, porque empecé a ir al colegio con ocho años. Para mi no ha sido nada fácil. Ha habido profesores que me han entendido y ayudado mucho, como mi tutora Araceli y otros, pero algunos no entendían mis dificultades.

Aquí en España o en este colegio, hay algunas construbres diferentes al país de donde yo venía, que no son ni mejores ni peores, son distintas. Se tiene mucho en cuenta las apariencias y el que dirán y los errores no se perdonan tan fácilmente. No te suelen aceptar si haces cosas diferentes y tienes distinta forma de ver la vida. Por lo que he tenido que cambiar bastante.

En el colegio he encontrado algunas amigas/os, tienen buen corazón, espero seguir con su amistad aunque acabemos la primaria y ellos vayan a otro colegio, ya que vivimos cerca y podemos quedar en el barrio.

Recuerdo cosas buenas de estos años como una buena tutora, algunas excursiones (Sos del Rey Católico, el Moncayo, Ayerbe, a la Pardina, etc) y cosas que he aprendido.

Me ha gustado que estuviera mi madre trabajando en mi colegio porque alguna vez la veía en los recreos y por los pasillos y le pedía cosas.

Cuando empiece el nuevo curso iré a otro colegio y estaré con otros profesores y otros compañeros .Pienso que todo va a ir mejor porque yo también he cambiado: soy más simpática, tengo menos genio y estudio más.

Luz